Dos ilustres colegios se crearon casi al mismo tiempo en Valladolid, el de San Gregorio y el de Santa Cruz, y ambos edificios muy diferentes entre si. Si bien hay que desmitificar que sea el primer edificio renacentista en nuestro país, si es uno de los primeros que introducen aquellos gustos italianos, hay que tener en cuenta que la base es genuínamente gótica y solamente en el patio y la parte central de la fachada se aprecia ese renacentismo (no digo "plateresco" pues como estilo no creo que exista, sino más bien como expresión decorativa).
También hay que decir que, exceptuando el cuerpo central de la fachada, el resto del exterior permaneció con aspecto gótico hasta bien entrado el siglo XVIII, cuando Manuel Godoy se encargó de regularizar y remozar su aspecto según el gusto neoclásico. Esta es otra de las joyas que posee nuestra Universidad en la actualidad y sigue, en parte, con su función de colegio universitario.
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